Rabat, la capital de Marruecos, alberga en la actualidad varias galerías de arte y espacios artísticos sostenidos por fundaciones privadas. El arte también está disponible en grandes formatos, gracias a los grafiteros que cada año son invitados a expresarse en los muros de la ciudad.
Uno de los museos de arte más notables de Rabat es el Museo Mohammed VI de Arte Moderno y Contemporáneo. Abrió sus puertas en 2014 con una exposición inaugural titulada «1914-2014, Cien creaciones», que marcó un hito. El museo ha convertido a Rabat en el epicentro de la escena plástica marroquí. Se trata de un regreso apropiado para la ciudad que, antes que Casablanca, vio nacer las primeras galerías de arte moderno del país. En 1957 abrieron L’œil Noir y La Découverte, dos espacios efímeros fundados por artistas, seguidos poco después por L’atelier, que de 1972 a 1992 expuso a todos los pioneros del arte moderno marroquí.
El Museo Mohammed VI de Arte Moderno y Contemporáneo alterna exposiciones individuales de las grandes figuras del arte mundial, como Picasso o Modigliani, con los grandes nombres de la escena marroquí. El museo también presenta a artistas jóvenes y extranjeros que trabajan en Marruecos. Este programa, así como las acciones llevadas a cabo en favor de estudiantes y universitarios, atestigua el compromiso de la institución con la difusión del patrimonio artístico marroquí, al tiempo que fomenta la creatividad y el desarrollo cultural.
Rabat también cuenta con varias galerías privadas muy activas, como Marsam (también editora), Galerie Nadira La Découverte, Abla Ababou Galerie o Fan Dok, por citar sólo algunas. Las fundaciones privadas también son muy activas, gracias a lugares como el Espacio de Arte de la Fundación CDG; la Villa des Arts de Rabat, apoyada por la Fundación ONA; o el Museo Bank Al-Maghrib, que exhibe una rica colección de arte moderno y contemporáneo. La capital también puede enorgullecerse de sus salas gestionadas por el Ministerio de Cultura, como Bab Rouah y Bab El Kebir.
La Villa des Arts de Rabat es una antigua y hermosa villa del siglo XX reconvertida en un gran espacio de exposiciones de arte contemporáneo que acoge regularmente muestras temporales. También integra el primer museo virtual marroquí, asociado a la organización Museos sin Fronteras, para ofrecer a los amantes del arte el primer museo virtual sobre arte islámico.
L’Apartment 22 es un espacio independiente de exposición y debate que cuestiona tanto la historia del arte como el contexto social, político y cultural de su surgimiento. Fundada en 2002 por Abdellah Karroum, también director de Mathaf (el Museo Árabe de Arte Moderno de Doha, Qatar), su papel de «microacademia» se vio reforzado tras el lanzamiento de R22, la primera radio web para el arte.
Rabat es ahora una de las ciudades más populares para los grafiteros contemporáneos, según la revista especializada Artsy. Desde la primera edición del festival Jidar, Toiles de Rue, en 2015, numerosos artistas, algunos de los más reconocidos internacionalmente, han ejercido su talento sobre las fachadas blancas de la ciudad. Varias de sus creaciones han recibido los honores de la prensa internacional, incluida la obra del artista callejero argentino Jaz, clasificada entre las más bellas del mundo. Cada año, grafiteros de todo el mundo se unen a artistas marroquíes para formar una fascinante mezcla de estilos y culturas.
El Museo de Historia y Civilizaciones y el Museo del Banco del Magreb son otros museos destacados de Rabat. La primera presenta exposiciones cronológicas de herramientas prehistóricas, mobiliario neolítico, estatuillas de bronce o cerámica de las primeras ciudades de la época islámica y una colección de piezas de bronce excepcionales. Este último cuenta con tres secciones dedicadas a la historia de la moneda, una galería de arte y una zona de negocios que detalla la historia de Banque du Maroc.
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